Andrea Luna: dulces prestosines made in la Tierrina.
/Créditos&love
Dirección creativa y estratégica: Susana López-Urrutia
Dirección de Arte y packaging: Ángel Espinosa.
/Flechazo
En cuanto Andrea García Luna, ‘la moza de Ujo’, llamó a nuestra puerta (virtual) y se coló por la pantalla el aroma a galletas recién horneadas de su obrador y la luz de su sonrisa nos enamoramos de ella. En aquella primera reunión Andrea nos habló de su obrador de dulces artesanos en Asturias: Alma Avellana. Un proyecto vital que nació de su valentía y talento y al que ahora, años después de su lanzamiento, empezaban a apretarle los zapatos. Andrea no sabía muy bien qué fallaba en Alma Avellana, pero sabía que no estaba a gusto. Se sentía encorsetada. Nuestras sesiones de trabajo conjuntas fueron casi terapéuticas. Y en una de ellas saltó la bomba: si Alma Avellana era y respiraba Andrea por los cuatro costados, ¿por qué seguir escondiéndose detrás de una marca corporativa? Animamos a Andrea a dar el paso y tomar una decisión estratégica que era también una fortísima apuesta por sí misma: saltar a una marca personal. Ella se lanzó de cabeza.
/La marca
Andrea Luna (re)nacía en 2021. El nombre es (casi casi) el de Andrea, pero hemos hecho un pequeño cambio en el orden de sus apellidos (Luna es el apellido de su madre: decidimos ponerlo en primer plano para agradecerle su apoyo incondicional a Andrea). Junto al cambio de nombre trabajamos en el desarrollo de un relato (la historia de vida de Andrea, marcada por la superación personal y la fuerza), un concepto creativo que pone en valor el estilo de vida de Andrea y su tierrina, Asturias (los ‘momentos prestosines’) y un universo gráfico de factura elegante e indudablemente artesanal.
Para trabajar la marca nuestro Dr de Arte @espinosa.studio realizó impresiones en tinta de los productos de Andrea (concretamente de sus galletas), que evocan a las lunas de su nombre. El packaging está muy trabajado para que la experiencia Andrea Luna sea ‘wow’ e incluye detalles como frases marcadas manualmente con sellos de caucho; lazos de algodón con los copys de la marca (‘hazte el amor’); pegatinas con el avatar de la marca … Que levante la mano quien no se quiera comer toda su tiendina ya de ya.
Andrea necesitaba un packaging de factura artesanal, pero elegante y con costes de producción bajos. Esta fue nuestra propuesta base.
¿Te encantan las fotos y te las quieres comer? Son de Sara Cañamero.
Trabajamos la marca con impresiones en tinta de las galletas de Andrea (¿a qué te recuerdan esos cráteres?). ¿Mola o no?
Los detallines tocan la patata, por eso en el estudio siempre nos los curramos a tope. Mira, mira.
Notición: existen las cintas de embalaje guays.
Golpe seco. O cómo sofisticar la papelería sin pretensiones. Nos encanta.
Flores y pegatinas personalizadas para una experiencia de unboxing wow.
Nuestro favorito: ¡la cinta de algodón para los pedidos de 'Hazte el amor'!
Las etiquetas para los pedidos. Minimalistas, con saborcito artesanal y elegantes.
Vale, estamos un poco pesados con los sellos de caucho. Qué le vamos a hacer: somos unos nostálgicos.
Nuestro cafe quiere hacer migas con estas galletas tan rebonicas.
